ISRAEL/PALESTINA | RSF exige una investigación exhaustiva y transparente sobre el asesinato de Shireen Abu Akleh
Tras insistir durante meses en que era imposible averiguar el origen del disparo que asesinó a la periodista de Al Jazeera, Shireen Abu Akleh, el Ejército israelí ha admitido ahora que es «altamente probable» que un soldado israelí le disparase «accidentalmente». Reporteros Sin Fronteras (RSF) exige a las autoridades de Israel que completen su investigación y revelen las circunstancias exactas de la muerte de Abu Akleh.
«Las autoridades de Israel continúan ocultando la verdad con vagas justificaciones e hipótesis, en lugar de admitir claramente lo que otras investigaciones ya han concluido: que las Fuerzas de Defensa de Israel mataron a la periodista palestina Shireen Abu Akleh», afirman desde el Área de Oriente Medio de RSF. «Han pasado casi cuatro meses desde su muerte y aún no se ha esclarecido el crimen».
«Existe una alta probabilidad de que Abu Akleh fuese accidentalmente alcanzada por un disparo dirigido hacia los sospechosos identificados como soldados palestinos armados durante el fuego cruzado», sostienen ahora las Fuerzas de Defensa de Israel en un comunicado emitido el 5 de septiembre. Sin embargo, la impunidad sigue prevaleciendo y la oficina del abogado general militar afirma lo siguiente en una declaración separada: «no hubo ninguna sospecha de delito que justifique la apertura de una investigación (penal)».
Abu Akleh llevaba un casco y un chaleco antibalas con la palabra «PRENSA» cuando fue asesinada con una bala dirigida a su cabeza mientras cubría una incursión militar israelí en la ciudad cisjordana de Yenín el 11 de mayo.
Al Jazeera, su familia y la Autoridad Nacional Palestina en Yenín han acusado a Israel de asesinarla intencionadamente, al igual que han concluido numerosas investigaciones (de la ONU, el New York Times, la CNN y otros), que afirman que un soldado israelí probablemente disparase el tiro mortal. A pesar de todos estos hallazgos, las autoridades de Israel han continuado insistiendo en que es imposible «determinar inequívocamente» el origen del disparo y continúan negando su responsabilidad.
Como respuesta al último comunicado de las Fuerzas de Defensa de Israel, la familia de Abu Akleh tuiteó ayer que han estado presionando a la Corte Penal Internacional para que investigase y juzgase el caso: «sabemos desde hace cuatro meses que un soldado israelí disparó y asesinó a Shireen, al igual que concluyen numerosas investigaciones. Sin embargo, como era de esperar, Israel se ha negado a asumir la responsabilidad del asesinato».
Al Jazeera también ha condenado el comunicado: «esta respuesta evasiva no es más que un intento de las Fuerzas de Ocupación Israelís de eludir la responsabilidad penal por el asesinato de Shireen».
Otro periodista asesinado, tres arrestados
La investigación del asesinato de Abu Akleh tiene lugar en un entorno cada vez más hostil para los periodistas palestinos.
La mañana del 5 de septiembre, el mismo día del comunicado del Ejército israelí, Nadal Ijbariya, de 44 años, fue hallado muerto en su coche en Al-Kina, un barrio de la ciudad cisjordana de Umm al-Fahm, tras ser tiroteado por unos desconocidos.
Fundador y director del sito web de noticias locales, Baladna, Ijbariya había recibido amenazas de muerte en el pasado y, en junio de 2021, subió fotos a Facebook e Instagram mostrando una ráfaga de disparos contra su casa. Él es la última víctima de una ola de violentos ataques en las comunidades árabes de Cisjordania.
La periodista palestina Lama Ghosheh fue arrestada por la policía israelí en su casa del barrio de Sheikh Jarrah, en Jerusalén, el 4 de septiembre. Los testigos afirman que la policía saqueó su domicilio antes de la detención.
Dos periodistas palestinos, Muhammad Ateek y Mujahid Al-Saadi, fueron detenidos por las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina en Cisjordania el 3 de septiembre. El Comité de Apoyo a Periodistas (JSC), una ONG local, respondió con un comunicado exigiendo a las autoridades que dejen de detener periodistas sin justificación alguna y «respetar las libertades para que los periodistas y el personal de los medios de comunicación puedan informar y mostrar las violaciones de derechos que la ocupación israelí lleva a cabo contra nuestro pueblo palestino en Cisjordania». Al-Saadi fue liberado pocas horas después de su detención.
Israel y Palestina ocupan los puestos 86 y 170, respectivamente, de 180 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2022 de RSF.