Reporteros Sin Fronteras condena el secuestro del periodista Hanad Ali Guled en Mogadiscio y urge a las autoridades a aclarar este último caso de violencia contra un profesional de los medios de comunicación.
Hanad Ali Guled, que trabaja para la cadena privada Goobjoog Television, fue secuestrado el 2 de abril por dos individuos armados en las inmediaciones de su domicilio. El periodista fue encontrado al día siguiente a 30 kilómetros al sur de Mogadiscio con signos de tortura e incapaz de articular palabra.
Poco antes de su secuestro, Guled había recibido amenazas relacionadas con su trabajo en “Media for Aid”, un programa que habría creado recientemente con el objetivo de llevar información a los residentes de zonas rurales afectadas por la sequía.
La violencia extrema contra el personal de los medios de comunicación es muy frecuente en Somalia. El pasado 12 de marzo el periodista Abdihamid Mohamed Osman escapó a un atentado contra su persona con una bomba lapa colocada en su vehículo en el distrito de Hamarwayne
El vicedirector de la policía, Mohamed Sheikh Hassan, ha asegurado a Reporteros Sin Fronteras que se ha iniciado una investigación para aclarar ambos casos y que darán a conocer sus avances tan pronto como se produzcan.
En realidad, las investigaciones sobre este tipo de ataques casi nunca terminan identificando a ningún responsable, y la impunidad de los autores contribuye a alentar más actos de violencia contra periodistas.
Además de la violencia procedente de individuos o grupos armados, como Al-Shabaab, las autoridades somalíes también contribuyen a violar la libertad de prensa bajo diversos pretextos.
Universal TV, por ejemplo, lleva prohibida en el noroeste de la región de Puntlandia desde el 5 de marzo por supuestamente haber emitido información falsa. Y Abdullah Warsame Roble, de Radio Kulmiye / Galgaduud Radio, está encarcelado desde el 31 de marzo por publicar comentarios en Facebook donde criticaba a la administración local.
AbdulMalik Muse Oldoon fue detenido en el aeropuerto de Hargeisa, en el noroeste de la region de Somalilandia, el 16 de febrero, tras ser acusado de cometer actividades “anti-nacionales” y publicar información falsa susceptible de alterar el orden público.
“Pedimos a las autoridades somalíes que hagan todo lo posible para garantizar la efectividad de las investigaciones en curso sobre el secuestro de Hanad Ali Guled y otros acontecimientos que han puesto en riesgo la actividad de los periodistas en las últimas semanas. También pedimos a las autoridades que pongan en libertad a los informadores detenidos. Corresponde a las autoridades proteger a los perodistas, no ser sus carceleros. Y proteger a los periodistas incluye combatir la impunidad de los actos de violencia que se cometen contra ellos”, recuerda Reporteros Sin Fronteras.
El Sindicato Nacional de Periodistas Somalíes también ha manifestado su preocupación por los numerosos ataques a periodistas y la falta de avances en las investigaciones.
Somalia ocupa el puesto 167 de los 180 países que conforman la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros Sin Fronteras.
Consulta más información sobre la situación de la libertad de información en Somalia en el Informe Anual elaborado por RSF-España.
