ISRAEL | RSF condena el cierre de emisoras en Cisjordania por parte de las Fuerzas de Defensa israelíes
Reporteros Sin Fronteras (RSF) condena el cierre de la radio Al-Khalil a la que Israel acusa de incitar a la violencia y que, el 21 de noviembre, fue clausurada por seis meses tras un registro por parte de soldados israelíes. Es la tercera emisora a la que se prohíbe transmitir en noviembre en Hebrón, en Cisjordania, donde varios medios han sido amenazados con correr la misma suerte.
Las Fuerzas de Defensa de Israel cerraron otra radio palestina en Hebrón el 29 de noviembre bajo la misma acusación de incitar a la violencia. Los soldados registraron Radio Dream, confiscaron equipos y causaron graves daños.
Apenas dos semanas antes de la incursión en Al-Khalil, Al-Hurriyya, una emisora de radio de Hebrón afiliada a Al Fatah, fue cerrada por los mismos motivos. Es la tercera vez que la cierran desde su creación, en 2002.
Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha sabido que otros medios de comunicación en Cisjordania han sido amenazados con la misma suerte. El ejército israelí hizo una advertencia a la emisora de Jenin Radio Al-Nass por “incitar al odio y la violencia”. Radio One y Wattan TV, que emiten desde Hebrón, también fueron amenazadas con el cierre por permitir a Al Hurriyya, una emisora de radio clausurada, que emitiera desde sus estudios.
RSF condena esta intimidación a medios de comunicación, a los que no les quedan recursos legales, e insta a las autoridades militares israelíes a que devuelvan el material incautado y permitan que estos medios reanuden sus actividades.
Las Fuerzas de Defensa de Israel acusaron a Al-Khalil en un comunicado de incitar a la violencia y el odio contra las fuerzas de seguridad y los civiles israelíes. El director de programación de la emisora, Ezz Haddad, negó la acusación.
“Condenamos esta decisión desproporcionada”, dijo Alexandra El Khazen, responsable para Oriente Medio de RSF. “Las autoridades utilizan el estado de emergencia para censurar a los medios de comunicación que no les gustan. Primero debería haber una investigación y luego, si se confirman los hechos, iniciarse los procesos judiciales”.
Las autoridades hacen un uso arbitrario de las leyes de estado de emergencia, que se remontan a 1945, en los territorios palestinos. La regulación permite a las autoridades censurar a los medios, así como detener a sospechosos sin remitirse a un juez y retenerlos sin juicio por tiempo indefinido. También se pueden cerrar medios sin pasar por un juez y sin más posibilidad de recurso legal que un tribunal militar.
Tras irrumpir en Al-Khalil durante la noche, los soldados saquearon la emisora y confiscaron equipamiento. Las fotos y vídeos publicados en las redes sociales muestran la magnitud de los daños. El Sindicato de Periodistas Palestinos condenó el cierre arbitrario y llamó a poner fin a los actos de violencia contra los medios de comunicación palestinos por parte de las FDI.
Por último, según nuestras fuentes, el gobierno israelí ordenó recientemente el cierre de otros dos medios de comunicación de propiedad de la rama norte del Movimiento Islámico, después de este grupo fuera declarado ilegal por incitar a la violencia.
Estos cierres ocurren en un momento de tensión y violencia entre palestinos e israelíes. Desde el inicio de esta ola de violencia en septiembre, RSF ha registrado más de 50 casos de ataques contra periodistas, algunos de los cuales fueron dirigidos deliberadamente por el ejército israelí.
Las fuerzas de seguridad israelíes están en la lista de “Depredadores de la Libertad de Prensa” de Reporteros Sin Fronteras, debido a su uso repetido de la fuerza contra los periodistas.
Israel ocupa el puesto 101, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2015 de Reporteros Sin Fronteras.
