Reporteros Sin Fronteras denuncia la expulsión del periodista británico William Davison, corresponsal desde hace tiempo en Etiopía. Las autoridades han rechazado renovar su acreditación.
William Davison, corresponsal de Bloomberg y The Guardian en Addis-Abeba, llevaba siete años trabajando en el país. El pasado 5 de marzo, los servicios de emigración le informaron en su domicilio que debía abandonar el país esa misma tarde si no quería pasar la noche en el calabozo.
William Davison llevaba meses intentando conseguir la renovación de su acreditación. Después de varias comunicaciones con la oficina de Asuntos de comunicación del Gobierno (GCAO), el ministro de Exteriores y el departamento a cargo de migración rechazaron su renovación. “No tenemos nada contra este periodista, pero tiene que cumplir todos los pasos del proceso para obtener su acreditación”, se limitó a afirmar la oficina de Asuntos de comunicación del Gobierno (GCAO).
En sus reportajes, William Davison, que dirige también la asociación de prensa extranjera en Etiopía, abordaba temas sensibles como la corrupción o la restauración del estado de urgencia impuesto el 16 de febrero.
“La expulsión pura y simple de un corresponsal extranjero establecido desde hace años resulta incomprensible e inaceptable”, denuncia Reporteros Sin Fronteras. “Multiplicar las trabas burocráticas para obstaculizar el trabajo de los periodistas y expulsar a los que mejor conocen el país no permitirá a Etiopía salir de su crisis política. El Gobierno debe comprender que los periodistas no son elementos subversivos sino testimonios esenciales que permiten simplemente informar a la población”.
El 14 de febrero las autoridades pusieron en libertad a dos periodistas encarcelados los últimos siete años. Pero la restauración dos días después del estado e urgencia permite de nuevo a las autoridades restringir las libertades de movimiento de la comunicación. La ley de excepción complica un poco más el trabajo de los periodistas, que deben obtener cartas oficiales, selladas por la oficina de comunicación de Exteriores (en lugar de las habituales acreditaciones de prensa) para no ser importunados por los servicios de seguridad en sus desplazamientos en la capital.
Etiopía ocupa el puesto 150 de los 180 países que conforman la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros Sin Fronteras.
Consulta más información sobre Etiopía en el Informe Anual elaborado por RSF-España.
