TURQUÍA | Un oyente asesina al locutor de radio Hazım Özsu porque sus comentarios le desagradaban

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Después de que el presentador de radio turco Hazım Özsu fuese abatido a tiros por uno de sus oyentes, al que no le gustaron sus comentarios «relacionados con los valores sagrados», Reporteros Sin Fronteras (RSF) lamenta que la intolerancia hacia los periodistas se haya convertido en algo normal en Turquía, y pide a la justicia que los proteja.

Un hombre armado abrió fuego contra Hazım Özsu, presentador de un programa de Radio Rahmet FM, a la puerta de su casa en la ciudad de Bursa, al noroeste del país, y luego huyó. El periodista, de 46 años, fue trasladado a un hospital con una herida de bala en la garganta y murió unas horas después.

Seis días después, la policía detuvo al presunto asesino, Halil Nalçaci, en su domicilio de Bursa, tras identificarlo examinando más de 300 grabaciones de cámaras de vigilancia, especialmente del barrio donde Özsu vivía con su madre.

Durante su primer interrogatorio de la policía, Nalçaci dijo que disparó a Özsu porque no le gustaban «ciertas expresiones relacionadas con los valores sagrados durante el periodo de Covid-19» que Özsu utilizaba en sus programas. «En el pasado llamé a la emisora para advertirles», dijo, «pero no me tomaron en serio y repitieron esos errores».

Fue a casa de Özsu porque se puso «furioso», dijo. «Cuando llegué a su casa, le dije a la persona que me abrió la puerta que era un amigo y que quería verlo. Cuando bajó, le dije: ‘Ahora te voy a callar’. Apunté mi pistola y le disparé en la garganta. Quise apuntar a su pierna, pero el disparo le dio ahí. Lo siento».

Nalçaci, que tiene una condena anterior por «causar lesiones con un arma de fuego», fue encarcelado el 16 de marzo acusado de homicidio premeditado.

Según el sitio web Bianet, colaborador de RSF en Turquía, en los últimos cinco años un total de 139 periodistas han sido objeto de agresiones físicas en ese país.

El último asesinato se produjo en diciembre de 2009, cuando Cihan Hayirsevener, director de noticias del canal de televisión local Marmara TV y editor del periódico Güney Maramara Yasam (Vida en el sur de Mármara), recibió tres disparos mientras caminaba por una calle de la ciudad de Bandırma. Los autores e instigadores de su asesinato recibieron largas condenas de cárcel.

Turquía ocupa el puesto 154 de 180 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2020 de RSF.