SIRIA | RSF urge a Estados Unidos a actuar rápido en el caso Steven Sotloff

Reporteros Sin Fronteras urge al gobierno de Estados Unidos a hacer todo lo posible para conseguir la liberación de Steven Sotloff, periodista freelance estadounidense que lleva secuestrado en Siria desde hace más de un año y se enfrenta a una situación simular a la de James Foley, compañero también estadounidense, asesinado por la milicia yihadí que se autodenomina Estado Islámico el pasado mes de agosto. 

En el vido de la decapitación de Foley, los miembros del Estado Islámica amenazaron con hacer lo mismo con Sotloff y, siguiendo su lógica asesina, lanzaron una campaña en Twitter bajo el hashtag #StevensHeadinObamasHands (la vida de Steven en las manos de Obama).

Reporteros Sin Fornteras pide al gobierno de Estados Unidos que actúe rápido para intentar salvar la vida de Sotloff y recuerda que la legislación internacional, la Convención de Ginebra y sus protocolos adicionales, la resolución 1738 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre la seguridad de periodistas y la resolución de la Asamblea General de naciones Unidas en 2013, hacen responsables a los Estados de la seguridad de los periodistas y les piden que tomen medidas para protegerles o ponerles en libertad. 

Cuando los periodistas son tomados como rehenes, sus gobiernos tienen el deber de actuar. En el caso de Sotloff son los Estados Unidos. Salvar rehenes no debería dejarse en las manos de sus familiares o de los medios de comunicación que emplean a los periodistas, que normalmente tienen que acudir al sector privado para poder obtener su puesta en libertad. En un acto de desesperación, la madre de Sotloff publicó, el 27 de agosto, un video en Internet donde pedía al autoproclamado califa del Estao Islámico, Abu Bakr al-Baghdadi, la puesta en libertad de su hijo. 

“Los periodistas mederecen una atención especial por los riesgos que corren para informar”, afirma Virginie Dangles, responsable de investigación de Reporteros Sin Fronteras. ” En el caso Sotloff, los Estados Unidos deben considerar todas las opciones posibles para conseguir su libertad”, añade. 

Los Estados Unidos han demostrado recientemente su capacidad para encontrar maneras de liberar rehenes. Por ejemplo, con intermediación catarí, consiguieron la libertad de Peter Theo Curtus, periodista y escritor estadounidense que llevaba 22 meses secuestrado en Siria por el grupo yihadista Al-Nostra. También el soldado Bowe Bergdahl fue intercambiado por presos de Guantánamo tras llevar cinco años secuestrado por los Talibanes. 

Las últimas liberaciones apoyan la idea de que se pueden llevar a cabo negociaciones para liberar a rehenes y que las opciones no incluyen solamente el pago de rescates o diversos tipos de operaciones militares. Más allá de esta política de no pagar rescates, es vital que el gobierno de Estados Unidos tome acciones concretas.