Fuente: @alcaldiadetulua
El periodista colombiano Marcos Efraín Montalvo Escobar, de 68 años, fue asesinado a balazos en la noche del domingo 19 de septiembre en Tuluá, municipio del departamento del Valle del Cauca (suroeste de Colombia). Se encontraba haciendo unas compras en el barrio Esperanza cuando un hombre que llevaba un casco de moto se le acercó y abrió fuego contra él. El agresor se unió luego a un cómplice y huyó en una motocicleta, según muestran las imágenes de cámaras de vigilancia de la zona. Marcos Efraín Montalvo Escobar resultó herido de gravedad y murió a causa de las heridas pocos minutos después del ataque.
Según el Diario Occidente, el periodista había recibido amenazas recientemente a causa de sus artículos. De acuerdo con varios de sus colegas consultados por RSF, Marcos Efraín Montalvo Escobar conocía bien la política local y denunciaba con regularidad y vehemencia la corrupción de la clase dominante, así como la violencia en la región. Las autoridades locales han anunciado la apertura de una investigación, pero no han avanzado si existe una línea de investigación destacada.
“Instamos a las autoridades locales a que realicen una investigación exhaustiva por el asesinato del periodista Marcos Efraín Montalvo Escobar y a que no descarten la pista profesional bajo ninguna circunstancia”, declara el director de la oficina de RSF para América Latina, Emmanuel Colombié. “Es sumamente preocupante la vulnerabilidad de los periodistas que trabajan en Valle del Cauca. Urge que tanto las autoridades locales como las nacionales garanticen la seguridad de quienes se dedican a la información, cuyo trabajo es vital para la población”.
Marcos Efraín Montalvo Escobar era un experimentado periodista, conocido y reconocido por su profesionalidad. En sus más de 40 años de carrera, había colaborado con numerosas publicaciones locales y nacionales, sobre todo impresas, como El Caleño, Diario Occidente, El País de Cali, los semanarios El Tabloide y El Mercurio, de Tuluá. Fue fundador de los periódicos El Reportero, La Variante, El Otro y El Picacho, y había trabajado para RCN Radio y para el programa “Alerta Valle del Cauca” de Radio Reloj de Caracol. Sin vinculación con ningún medio en concreto, desde hacía algunos años comentaba la actualidad local de Tuluá y de la región en su página de Facebook.
El departamento del Valle del Cauca lleva varios años siendo escenario de numerosos conflictos territoriales y enfrentamientos violentos entre grupos armados. Destaca en la zona la expansión del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y del “Clan del Golfo”, y también permanecen disidencias de las FARC, otros grupos criminales y el ejército nacional. Según la organización Indepaz, solo en 2021, doce líderes sociales fueron asesinados y cerca de cuatro masacres ocurrieron en este departamento, el cual, junto con Chocó, Cauca y Nariño, registran las mayores violencias, así como la disputa permanente por el control territorial y las rutas del narcotráfico. La presencia de nuevos y antiguos narcos preocupan a las autoridades.
Los dos últimos años han sido especialmente graves: en abril, sobrevivió a un atentado el periodista independiente Luis Carlos Ayala en Cali, capital del departamento. En esa misma ciudad, el 21 de diciembre de 2020 fue asesinado Felipe Guevara, periodista judicial del diario Q´hubo. El Valle del Cauca y en particular su capital, Cali, fue uno de los epicentros del reciente paro nacional, donde la FLIP (Fundación para la Libertad de Prensa) y RSF contabilizaron cerca de 68 casos de ataques a periodistas, de los cuales destaca el sufrido por el equipo periodístico del Canal 2. Entre 2019 y 2020, cinco periodistas del departamento fueron amenazados y posteriormente tuvieron que exiliarse. La FLIP contabiliza 77 víctimas solo el presente año en el Valle del Cauca.
Colombia ocupa el puesto 134 de 180 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa publicada por RSF en 2021.
