Entre el 2 y el 14 de marzo de 2010 tres periodistas han sido asesinados a balazos en Honduras. La víctima más reciente fue Nahúm Palacios, de 34 años de edad, director de noticias de la Televisora de Aguán, Canal 5. El periodista fue asesinado el 14 de marzo durante una emboscada en Tocoa, localizada 400 kilómetros al norte de la capital. El vehículo presentaba más de 40 impactos de bala, el cuerpo del periodista, una treintena. Los dos acompañantes de Nahúm Palacios, entre ellos un camarógrafo, resultaron heridos.
A priori, este crimen tiene la huella del crimen organizado, la región atlántica es un bastión del narcotráfico, aunque podrían existir otros móviles. Tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, Nahúm Palacios había sufrido atropellos y vejaciones por parte de los militares, quienes le habían incluso confiscado su equipo de trabajo, según el Comité por la Libre Expresión (C-Libre). Esta organización también precisó que el periodista y uno de sus colegas habían recibido amenazas telefónicas advirtiéndoles que dejaran de “defender a los pobres”.
Hace apenas una semana, un periodista de la misma región, David Meza Montesinos, fue asesinado de manera similar, diez días después del homicidio de otro colega, Joseph Ochoa, en Tegucigalpa. Honduras es, después de México, el país más peligroso del continente para los periodistas.
