Reporteros Sin Fronteras rechaza las sanciones del Consejo Nacional de Comunicación a 22 medios de comunicación, entre las que se incluyen el cierre permanente de dos periódicos, cuyos trabajadores tienen prohibido en adelante trabajar como periodistas.
El anuncio de este órgano regulador de los medios de comunicación en Camerún se produjo el 6 de diciembre. La orden dictaba la suspensión de 18 periódicos, un programa de radio, y prohibiciones de seis meses a un año de ejercer el periodismo a un total de 27 profesionales.
Las sanciones suponen un mensaje intimidatorio para todos medios de comunicación en Camerún, en un contexto de especial tensión política en la que varias personas han sido asesinadas en los enfrentamientos entre manifestantes y policía en la región del país de habla inglesa.
En muchos casos, el Consejo Nacional de Comunicación ha justificado sus sanciones en “publicaciones de acusaciones sin base, ofensivas e insultantes”, en otras palabras, difamación. El castigo más duro es el cierre permanente para L’Aurore (y su publicación hermana L’Aurore Plus) y Dépêche du Cameroun.
Michel Mouchault Moussala, de L’Aurore y L’Aurore Plus, tiene prohibido de ahora en adelante ejercer el periodismo en Camerún. Tras 35 años de profesión, la sentencia le impide volver a practicarla el resto de su vida.
La otra víctima de una prohibición vitalicia es Gilbert Avang, del Dépêche du Cameroun. “Lo he sabido por la prensa. Ni yo ni mis abogados hemos sido oficialmente notificados. Seguiré publicando hasta que reciba la notificación oficial”, ha afirmado Avang.
“Estamos consternados por estas decisiones, especialmente severas y faltas de transparencia”, afirma Cléa Kahn-Sriber, responsable de la oficia de África de Reporteros Sin Fronteras. “ Con pocas excepciones, estas medidas pretenden afectar a los medios de oposición y beneficiar a oficiales del Estado o figuras públicas próximas al Gobierno. Pedimos al Consejo que sea más transparente en sus métodos, lo que le llevaría a legitimar sus acciones de cara al público”, añade Kahn-Sriber.
Reporteros Sin Fronteras ya ha criticado con anterioridad al Consejo Nacional de Comunicación de Camerún. En 2013 cuestionó sus métodos para silenciar periodistas.
Cabe recordar que en la actualidad hay tres periodistas que están siendo juzgados en el país: Ahmed Abba, Rodrigue Tongue y Felix Cyriaque Ebolé-Bola, así como el profesor de periodismo Baba Wame, están acusados ante un tribunal militar de no haber informado a las autoridades de actividades terroristas de las que supuestamente tenían conocimiento.
No hay ninguna prueba que demuestre estas acusaciones y el principal efecto de este juicio es la disminución de la libertad de prensa en Camerún, que ocupa el puesto 126 de los 180 países que conforman la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros Sin Fronteras.
Lee mas información sobre la situación de la libertad de prensa en Camerún en el Informe Anual elaborado por RSF-España.
