Marcos de Barros Leopoldo Guerra, bloguero que denunció la corrupción de las autoridades locales, fue asesinado en su casa en Ubatuba (en Sao Paulo) el 23 de diciembre de 2014. Su crimen muestra una vez más el nivel de violencia contra los profesionales la información en Brasil y la necesidad de que las autoridades tomen medidas de protección efectivas.
El pasado 23 de diciembre, Marcos de Barros Leopoldo Guerra, bloguero y abogado, fue asesinado en su casa por desconocidos. La víctima había denunciado en su blog, Ubatuba Cobra, casos de corrupción. La policía ha dicho que no descarta la pista profesional, ya que es probable la relación entre el crimen y el material publicado en el blog. El padre del bloguero reveló a la policía que su hijo había recibido amenazas.
“Reporteros sin Fronteras condena el asesinato de Marcos de Barros Guerra Leopoldo. Solicitamos a las autoridades que lleven a cabo una investigación independiente, exhaustiva e imparcial, y que los responsables sean llevados ante la justicia “, dijo Claire San Filippo, responsable para América de la organización”.
“Es esencial que las autoridades tomen medidas concretas para la protección de los periodistas. Por otro lado, también hace falta una lucha activa contra la impunidad, ya que favorece que se multiplique los actos de violencia y limita peligrosamente la libertad de información”.
El informe de la Secretaría de Derechos Humanos sobre la violencia contra los periodistas, publicado en marzo de 2014, había recomendado la creación de un Observatorio -en colaboración con la UNESCO- sobre la Violencia contra los comunicadores, así como la federalización de las investigaciones de los crímenes cometidos contra los profesionales de la información. El mismo documento también insistió en la necesidad de un estudio que se llevó a cabo por el Ministerio de Justicia, sobre el equipo de seguridad adecuado para garantizar la protección de los periodistas en la cobertura de situaciones de conflicto.
Brasil es el tercer país más peligroso del continente americano para la profesión periodística. Entre enero de 2000 y septiembre de 2014, 38 periodistas fueron asesinados por razones que, probablemente, tengan su relación con su actividad profesional. La tendencia ha empeorado en los últimos años, con al menos diez periodistas asesinados por causa de su profesión en 2012 y 2013. Casi todos investigaban temas delicados, como la delincuencia organizada, violaciones de los derechos humanos o la corrupción. Hasta la fecha, la mayoría de estos crímenes siguen impunes.
Brasil se encuentra en el 111 lugar (entre 180 países) en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2014 de Reporteros Sin Fronteras. Más sobre el país, en el Informe Anual de la organización.
